El alcalde de Herrera, Jorge Muriel, ha anunciado en una rueda de prensa celebrada esta mañana en el consistorio municipal, el cierre de los edificios públicos que son competencia del Ayuntamiento para frenar el aumento de contagios de COVID-19 . Además, recomienda a los vecinos que se autoconfinen “en la medida de sus posibilidades” y que todos los comercios, incluyendo la hostelería, cierren a las 22:00 horas.
En sus declaraciones, Muriel ha manifestado que no estarán abiertos al público lugares como la biblioteca, la Casa de Cultura o el propio Ayuntamiento y que sus servicios se prestarán por vía telefónica, con excepciones como el sistema de registros. Sin embargo, ha aclarado que sí seguirán en funcionamiento el C.E.I.P. Nuestra Señora de los Dolores y el I.E.S. Herrera, ya que su gestión es competencia de la Junta de Andalucía.
Además, el edil ha explicado que aún no se ha realizado un cribado en Herrera y sí en otras poblaciones cercanas debido a que el pasado lunes Herrera tenía una incidencia de COVID-19 de menos de 500 casos cada 100.000 habitantes pero ha añadido que pedirá a la Junta que se haga un cribado la próxima semana.
Asimismo, se ha mostrado preocupado por el brote que se ha producido en la Residencia Manuel Molinero, que ha afectado a doce internos y dos trabajadores, por la avanzada edad de sus residentes y ha dicho que si siguieran incrementando los positivos se medicalizaría la residencia como establecen los protocolos sanitarios.
Respecto a las causas del repentino crecimiento de contagios, el alcalde ha reivindicado sus medidas y la labor policial, indicando que Herrera tomó medidas muy restrictivas con uno de los ratios de positivos más bajos del entorno, por lo que “algún protocolo se ha tenido que saltar” por parte de los vecinos.
Muriel ha cerrado su intervención apelando a la responsabilidad individual y se ha mostrado confiado en que Herrera superará esta ola de COVID-19 y en que sea un pueblo capaz de “no tener esperar a que otros lo confinen”.